¡El verano ya llegó y qué mejor momento para ir a la playa en familia! Si estás pensando en llevar a tu peque a la costa, es fundamental tomar algunas precauciones para asegurarte de que la experiencia sea segura y disfrutable para todos. Acá te dejamos algunos consejos clave:
1. Protección solar desde el principio:
La piel de los bebés es super delicada, así que es clave ponerles protector solar desde bien temprano. Buscá fórmulas especiales para bebés, con un factor de protección alto y resistentes al agua. Aplicá generosamente y seguido, especialmente después de cada chapuzón.
2. Ropa adecuada:
Vestí a tu bebé con ropita fresca y de colores claros para protegerlo del sol. Considerá usar ropa con protección solar y no te olvides de un sombrero con ala ancha para cuidar su carita.
3. Sombrilla o carpa playera:
Arma una sombrita extra con una sombrilla o una carpa playera. Así tu bebé podrá descansar cómodo y resguardarse del sol durante el día.
4. Hidratación constante:
Los peques pueden deshidratarse rápido, sobre todo con calor. Asegurate de ofrecer agua seguido, aunque no tengan sed aparente. Evitá exponer al bebé al sol en las horas más fuertes del día.
5. Juguetes y entretenimiento seguro:
Llevá juguetes apropiados para la playa, cuidándote de piezas pequeñas que puedan ser peligrosas. Un baldecito y una palita son opciones seguras y divertidas.
6. Evitá las horas pico:
El mediodía suele ser fuerte en cuanto a sol. Tratá de planificar tu visita a la playa temprano en la mañana o al final de la tarde para reducir la exposición al sol.
7. Cambio de pañales y pañales de agua:
Asegurate de tener un lugar cómodo y con sombra para cambiar los pañales. Además, considerá usar pañales de agua para evitar problemas en el agua.
8. Atención a la temperatura del agua:
Antes de meter al bebé al agua, chequeá que esté a una temperatura agradable y segura. La piel sensible de los bebés puede reaccionar más ante temperaturas extremas.